Verano breve

La pregunta parece fácil: Una pequeña frase que resuma este verano, cuanto más breve, mejor, puede valer incluso una pequeña lista de palabras.

Las respuestas abarcan todos los espectros.

Hay quien no ha podido disfrutarlo como le habría gustado: "¿Verano? ¿Dónde?", "¿Qué verano?", "Si lo sé, no vengo", "Que me devuelvan el dinero. Lástima que no compré el verano en el Corte Inglés", "¡Hay que ver...!". Pero sin duda, mi respuesta preferida, por lo acertada, es esta: "Un verano desesperante de expectativas frustradas, planes aplazados, caras sin boca, lejanía física, contactos fugaces, cercanía digital, búsqueda de momentos felices, mucha introspección y la necesaria dosis de esperanza".

Dos se han ido a las canciones; "Es una lata el trabajar…" y "Perdido en mi habitación sin saber qué hacer, se me pasa el tiempo…"

Otros son algo más optimistas: "Desde la tranquilidad que me ha dado conocer mi provincia y la de al lado, solo puedo agradecer este verano atípico. Los abrazos vendrán luego", "Andar mucho por el monte para olvidar el estrés", "Firmo por muchos veranos  como este", "Ver disfrutar a mis hijos, querer seguirlos y no alcanzarlos", "El mejor confinamiento, en la Ojeda" y "Vida nueva y disfrute cada minuto".
Y uno en verso:

"A pesar de las incertidumbres y ser muy tristón, 

lo he disfrutado intensamente y con pasión"

Y algunos más descriptivos: "Montaña rusa de emociones", "Naturaleza viva", "Verano típico de la nueva normalidad", "Cómo visitar 4 países en 10 días en tiempos de coronavirus", "Campeonatos de atletismo pasados por la tele", "De mi casa a casa de mi madre", "De vuelta al alcohol" y "Minimalismo energético y cómo conseguirlo desde pequeñas acciones y grandes inacciones".

Están también los que han puesto una palabra y la han explicado: "Peleado, porque he tenido que luchar para poder disfrutarlo", "Aburrido, solo limpiar y limpiar", "Compañía: hemos aprendido a disfrutar los unos de los otros", "Suerte por haber tenido verano", "Trabajo (y bien recibido es)", "Reunión familiar en el pueblo, breve, pero intensa" y "Más vida: Calor, días más largos y vacaciones".

Respecto a las listas de palabras, ahí van las más citadas: Familiar y raro (10), tranquilo, mascarilla y playa (5), atípico y amigos (4), desconexión y descanso (3). Y con dos menciones: Anómalo, interesante, paseos, relax, gatos, diferente, pueblo, triste, casero y corto.

Y muuuchas palabras únicas:
Activas: Turismo, viaje, maleta, nómada, ruta, senderismo, caminatas, deportivo y rural.
Geográficas: Alicante, Polientes, Portugal, Cuérnago, Denia, Santander, Teide y Francia.
Víricas: A la defensiva, distancia social, burbuja, asocial y cuarentena.
Gastronómicas: Sobremesas, teleclub, chiringuito, comer y aperitivo.
Campestres: Aire libre, montaña, nogal, refrescante, naturaleza, jardín, pinos, lagartos y sol.
Relajantes: Paz, soledad, relajación, fuera agobios y dolce farniente.
Agobiantes: Activo, estresante, intranquilo, amenazador y susto.

Unos cuantos adjetivos más: Aceptable, barato, improvisado, esperanzador, bonito, nacional, breve, de despedidas, liberador, prematuro, interminable y alegre.

Y las últimas palabras: Incertidumbre, mantenimiento, duda, expectativa, fiesta, ocio, reencuentro, pigazos, aceptación, los cinco juntos y una mascota: Rocky.

¿Y qué queda? Pues mi verano... que he resumido aquí:

Muchas gracias a todos los participantes.
¿Qué aportación es la que más os ha calado?